El Gobierno está ultimando el proyecto de Real Decreto de envases irrellenables para el aceite cuyo objetivo es que los aceites de oliva y de orujo de oliva, en hostelería, restauración y catering estén obligatoriamente envasados, etiquetados y con un cierre que pierda su integridad tras su primera utilización, debiendo ser además, irrellenables.
Así lo anunciaba ayer jueves el ministro Arias Cañete, quien añadía que el proyecto se someterá a aprobación por el Consejo de Ministros y la fecha prevista para que entre en vigor será el próximo mes de enero de 2014.
En este sentido, el ministro explicaba que “esta disposición no obligará a la utilización de un tipo concreto de envase, sino de cualquiera que asegure que el aceite que contiene, y que el consumidor recibe, se corresponde con lo declarado en la etiqueta.”
A juicio del ministro, el aceite de oliva ha experimentado en los últimos años “una cierta banalización, que es urgente superar, recuperando el lugar destacado que le corresponde como base y símbolo de nuestra Dieta Mediterránea, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”.
Convenio de colaboración con el sector
En términos más generales, Arias Cañete avanzaba que en enero del próximo año se suscribirá un importante convenio de colaboración con las organizaciones y asociaciones representativas del sector y la distribución con el objetivo de definir un marco de cooperación a favor de la mejora de la calidad del aceite de oliva y de su valorización ante el consumidor y los mercados.
El Convenio recogerá un conjunto de compromisos a asumir por cada una de las asociaciones, a través de un mensaje potente de unidad y trabajo en común. Entre las acciones que incluye estará la posibilidad de desarrollar campañas conjuntas de comunicación y promoción, destinadas a la mejora de la percepción del valor y de la calidad del aceite.